David nació en 1968, una época donde España crecía económicamente debido a las inversiones extranjeras, así como por el boom turístico. Era la última etapa del franquismo y, con ello, las libertades eran más amplias que la década anterior debido al Plan de Estabilización que llevaron los dirigentes “tecnócratas”. Una época que se desarrollaba la televisión en España, donde TVE tenía dos canales de TV, la primera y la segunda, por supuesto, en blanco y negro, en las bandas de frecuencia VHF y UHF. Además de la TV, tenían mucha fuerza como medio de comunicación la radio y la prensa. Eran los años de muchos movimientos sociales y culturales a nivel mundial influenciados por la Guerra Fría entre EE.UU. y la URSS. La época que The Beatles y The Rolling Stones revolucionaron el mundo con su música. A David, desde que era pequeño, le llamó la atención todo lo relacionado con la Comunicación. Recuerda como con solo 6 años cogía los discos de vinilo de Marisol (este era multicolor) y Los Brincos y los ponía en el tocadiscos marca Conver para escuchar música. En el colegio donde estudió EGB, Princesa Sofía (1975-1982), los profesores destacaban su carácter creativo haciendo poesías, así como interpretativo, siempre lo seleccionaban para hacer obras de teatro. Un hecho que le impactó mucho, cuando solo tenía 7 años, fue el fallecimiento de Franco. No entendía la incertidumbre de aquellos momentos, pero pronto vio que las cosas iban a cambiar con el nacimiento de una joven democracia. Fruto de ese cambio radical, de una dictadura a una democracia, hubo un estallido de libertad de expresión en las calles y en la música, y surge la movida madrileña y la época de oro del pop español con grupos como: Radio Futura, Golpes Bajos, Alaska y Los Pegamoides, Loquillo y Los Trogloditas, La Unión, Siniestro Total… Toda esa música le sumerge a amar la música y, como no, la radio que la emitía.